Este diseño de la 87.1 realmente evocan a bucles de caramelo macizo o piezas de tela de algodón colgadas anunciando buenas cosas. Para su creación se utiliza agua carbonatada para atrapar el aire en una matriz de vidrio supercalentada que se estira verticalmente y se dobla sobre sí misma entre los broches en numerosas ocasiones. A medida que el vidrio se enfría, el movimiento de plegado a lo largo de la veta del aro formado convierte el aire atrapado en microfilamentos que le dan a la pieza una calidad óptica aperlada de belleza impresionante. Finalmente se introduce una fuente de luz de xenón o LED de bajo voltaje en un extremo de la lámpara que forma bucles de luz que se van proyectando a través de los microfilamentos y con registros variantes y suaves. La longitud de caída puede ser ajustable.